En un mundo actual donde las palabras se convierten en modas, es importante interiorizarnos con ellas para entender de qué estamos hablando.

Hoy vamos a hablar de las STARTUPS, término recurrente en el último tiempo, su importancia y sus características.

¿Qué es una startup?

Una Startup es una organización con gran capacidad de cambio, que desarrolla productos o servicios, de gran innovación, altamente deseados o requeridos por el mercado, donde su diseño y comercialización están orientados completamente al cliente. Esta estructura suele operar con costos mínimos, pero obtiene ganancias que crecen exponencialmente, mantiene una comunicación continua y abierta con los clientes, y se orienta a la masificación de las ventas.

¿Por qué son importantes las startups?

Cada startup está respaldada por una idea que busca simplificar procesos y trabajos complicados, con el objetivo de que el mercado tenga una experiencia de uso simplificada y fácil.

¿Cuáles son las características de una startup?

Las principales características son su gran capacidad de adaptación al cambio, orientación exclusiva al cliente, financiación de capital riesgo y ganancias que crecen exponencialmente en poco tiempo.

Estas son las más importantes para ser considerada como tal:

Juventud - No todas las pequeñas empresas y emprendedores son startup. Una startup es una compañía joven que nace para evolucionar hacia una pyme o cerrar.

Bajo coste - Este tipo de empresa suele tener unos costes muy por debajo de sus ganancias. A diferencia de una pyme, no necesitan grandes inversiones para aumentar sus beneficios. Piensa en Microsoft, que nació en el garaje de Bill Gates.

Escalabilidad - La startup tiene una elevada capacidad para generar ingresos importantes de forma rápida y muy por encima de sus costes. Es decir, su margen de beneficio es exponencial.

Tecnología - Aunque no es excluyente, la mayoría de startup tiene un fuerte componente tecnológico. Son negocios con ideas muy innovadoras que basan su modelo de negocio en las nuevas tecnología, incluso para encontrar financiación.

Trabajar en una startup tiene muchos elementos distintivos, no sólo a nivel de impronta operativa, sino a nivel del tipo de competencias necesarias y a desarrollar en el día a día.

Una de las principales competencias es la Polifuncionalidad la cuál implica poder realizar varias tareas en un breve lapso de tiempo, implementando la capacidad de análisis, el foco operativo pero sin perder de vista cierta visión global que llevaría que el colaborador no pierda de vista el agregado de valor de su quehacer en el proceso general de trabajo.

Esta competencia es muy necesaria en el desarrollo de las startups dado que implica poder acompasar el rápido desarrollo del negocio en breves períodos de tiempo, si lo comparamos con el promedio de crecimiento de estructuras de negocio más tradicionales. La flexibilidad y laxitud en los procesos de trabajo, lleva lógicamente a que la polifuncionalidad se vuelva la clave para poder adoptar el ritmo de crecimiento y amoldar la dinámica de trabajo a las exigencias del negocio.

En próximas ediciones, trabajaremos más en detalle en cómo impacta la Polifuncionalidad en la dinámica de trabajo en equipo en las Startups.